El tercer lugar que Daniel Filmus obtuvo en 2013 y que lo eyectó del Senado, dejó al kirchnerismo sin un candidato en territorio porteño y desnudó su grave falta de conducción en el distrito.

Filmus perdió 6 veces seguidas con el PRO y eso lo dejó afuera de las consideraciones del peronismo en la Capital para enfrentar al macrismo en 2015. “Brasil se comió 7 con Alemania, nosotros no queremos perder 7 elecciones seguidas con el PRO”, bromeó un peronista porteño a LPO.

Pero las alternativas, como cada vez que tuvo que conformarse con Filmus, no son alentadoras para el kirchnerismo en la Ciudad.

Fuentes del kirchnerismo porteño aseguran que no hay interlocutor para definir a los candidatos para la jefatura de gobierno. Ni Carlos Zannini, mano derecha de Cristina Kirchner que digitó las elecciones en la Ciudad a lo largo de la década, ni La Cámpora, que no baja directivas de Casa Rosada como hizo históricamente.

Como nadie se encarga de ordenar el distrito, varios dirigentes del kirchnerismo porteño ya lanzaron sus candidaturas en soledad. Ejemplos son la legisladora de Nuevo Encuentro, Gabriela Cerruti; Aníbal Ibarra, destituido en 2006 por el caso Cromagnon; e incluso un dirigente ignoto como Gustavo López, ex subsecretario de Oscar Parrilli.

Por La Cámpora, por su parte, Juan Cabandié se autoproclama en privado como el candidato de Cristina para enfrentar al PRO y asegura que en la elección de 2013 no quedó tan mal parado como se preveía con respecto al resultado que obtuvo Filmus.

El ala izquierda del kirchnerismo, en tanto, está estudiando abrirle la llave de las primarias del Frente para la Victoria a otras fuerzas que han sido muy críticas del Gobierno nacional.

El legislador Pablo Ferreyra, que llegó a su banca de la mano del titular de La Cámpora, Andrés “Cuervo” Larroque, inició conversaciones con Claudio Lozano, a quien se le vence la banca de diputado a la que accedió en 2011 tras integrar la lista de Hermes Binner en la Capital.

El espacio de Ferreyra, antes Izquierda Popular y ahora rebautizado “Seamos Libres”, quiere sumar a Lozano para armar un frente antimacrista en los comicios de 2015. El objetivo es disputarle espacios opositores al PRO al frente Unen, para no quedar terceros en las elecciones.

Es por eso que quieren convencer a Lozano, que en 2013 sacó 2 puntos, que se alejó de Binner tras su acuerdo con el frente de Elisa Carrió y Pino Solanas.