El Indice de Precios al Consumidor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (IPCBA) registró una suba promedio del 21,1% mensual en diciembre y del 198,4% en la variación interanual, máximo histórico desde que la Ciudad de Buenos Aires empezó a medir la inflación en 2012.
Entre los rubros que mostraron los mayores incrementos se destacan alimentos y bebidas no alcohólicas con un 30,4% y Transporte que promedió una suba de 30,4%. Le sigue un fuerte aumento del 26,9% en Cuidado personal y protección social; Bebidas alcohólicas y tabaco 23,3%; Información y comunicación 22,2%, mientras que Equipamiento y mantenimiento del hogar avanzó 21,9%
"La inflación se explica en el aumento de Bienes, fundamentalmente en las divisiones alimentos y bebidas no alcohólicas y transporte, división en la que impactó el fuerte ajuste en los precios de los combustibles", indicó MarÃa Eugenia Lago, directora general de EstadÃstica y Censos de la Ciudad.
"La tendencia creciente en la inflación en los productos que incluyen la canasta básica siguen su inercia y que esto va a significar un aumento de la pobreza. Sistemáticamente en periodos inflacionarios hay un deterioro de los ingresos que corren por detrás de los precios", puntualizó la funcionaria.
El IPCBA es el primer dato oficial de la inflación de la era Milei. Como este indicador suele moverse en lÃnea con el IPC nacional, es tomado como un indicio de lo que puede arrojar el Indec el próximo jueves.
Sin embargo, el IPC nacional no necesariamente coincide con el de la Ciudad porque difieren en la ponderación de los productos. Por ejemplo, los alimentos poseen mayor peso en el IPC Nacional que en el IPC de la Ciudad, mientras que los servicios públicos tienen mayor ponderación en la canasta de CABA. AsÃ, una variación de los precios de los alimentos incide en mayor medida en los números que da a conocer el Indec, mientras que un aumento en las tarifas de los servicios públicos tiene una incidencia mayor en la inflación de la Ciudad.
Para el economista Salvador Vitelli esta diferencia en la ponderación de la canasta es lo que explica que el dato de inflación de CABA se haya ubicado por debajo de las estimaciones de las consultoras que proyectan un piso del 30% para el indicador nacional de diciembre: "Los bienes corrieron al 30% mientras los servicios al 14%". AsÃ, el tarifazo que se espera en las facturas de gas y electricidad como en el boleto de transporte público, va a pegar más duro en el resultado del IPC porteño para el mes de enero.
En el mismo sentido Gabriel Caamaño afirmó que "en diciembre los precios de los servicios compensaron a los bienes en una magnitud no vista en todo el año".
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Por otro lado, los keynesianos recomendaban subir los impuestos y bajar el gasto cuando había mucha inflación. Evidentemente, en el pasado, tampoco le hicimos mucho caso a Lord John Maynard Keynes.
Por último, la Escuela de las Expectativas Racionales del ingeniero norteamericano Robert Lucas señalaba que para bajar la inflación en serio se necesitaba primero alcanzar el orden fiscal y el déficit cero. De los últimos 70 años solo tuvimos superávit presupuestario en muy pocos de ellos, es decir, tampoco le hicimos mucho caso a esta prestigiosa escuela del pensamiento económico mundial.
Por lo que estoy observando en la actualidad, con Milei como presidente, el gobierno está tomando muy en serio las recetas para derrotar a la inflación de los grandes pensadores económicos.
Habrá que tener paciencia, ya que, será muy duro corregir todos los desequilibrios económicos y monetarios acumulados en el pasado.
Mentile a tu madre, sorete. Vamos a extrañar a Moreno, mentía menos.