"Más que proteccionismo o libre mercado, el cambio que plantea la administración Trump es del multilateralismo a las negociaciones bilaterales", esboza el ministro Cabrera, en un interesante análisis del sinuoso comportamiento comercial de la administración republicana.
Lo explica en una charla con periodistas que vinieron a Lima a cubrir la Cumbre de las Américas. El encuentro se produce en una suite del hotel Westing, ubicado en el flamante distrito financiero de San Isidro, donde se desarrolló la cumbre paralela de negocios organizada por el BID.
Cabrera que llegó a Perú un dÃa antes que Macri, aprovechó para tener dos reuniones claves. Primero se reunió con su par de Estados Unidos, Wilbur Ross y luego con Curtis Joseph "C.J." Mahoney, el número dos del duro negociador comercial de la administración republicana, Roberto Lighhthizer.
En el encuentro con Ross el ministro de la Producción desgranó los conocidos argumentos sobre la baja incidencia en la economÃa norteamericana de las exportaciones argentinas de acero y aluminio. Ross no quiso comprometerse a responder si la excepción a los altÃsimos aranceles impuestos por Trump que vence en Mayo, será definitiva.
La conversación luego derivó hacia China, razón originaria de la suba de aranceles y eje del intenso lobby que los funcionarios de Trump están desplegando en esta cumbre, contra el gigante asiático.
Pero fue con Mahoney que empezó la acción. El funcionario blanqueó que su gobierno está analizando un sistema de "cupos" de importaciones sin los nuevos aranceles, para aplicar a aquellos paÃses que han quedado momentáneamente exceptuados de la barrera comercial, como Argentina.
Cabrera reconoció que "nosotros apsiramos a que ese cupo cubra la totalidad de lo que exportamos y ellos quieren que sea menor". Sin embargo, el ministro se mostró optimista: "Tenemos la expectativa de salir airosos".
El encuentro es interesante porque exhibe con crudeza la lógica de comerciante -caso por caso- que Trump le quiere imprimir a su relación con el mundo.
Fuentes de la industria del acero afirmaron a LPO que si los cupos alcanzan lo exportado el año pasado, serÃa un buen resultado para el sector. En 2017, Argentina exportó a Estados Unidos USD 550 millones de aluminio y USD 220 millones de acero, en un intercambio básicamente concentrado por Aluar y Techint.
Cerdos y limones
Cabrera no habló con los funcionarios norteamericanos sobre el bloqueo que sufre el biodiesel, principal rubro de exportación. A Estados Unidos. "Es un tema entre privados, preferimos concentrarnos en el acero y aluminio que son decidiones directas del Gobierno", simplificó.
El ministro sà celebró que el próximo martes partirán finalmente los primeros embarques de limón a ese mercado y vaticinó que pronto se avanzará sobre la habilitación de nuevos cortes de carne bovina.
Por otro lado, confirmó que el gobierno acaba de terminar de darle todas las aprobaciones sanitarias al ingreso de cerdo de Estados Unidos, una polémica concesión que el vicepresidente Mike Pence le sacó a Macri en su última visita a la Argentina. Pence es productor de cerdos y ex gobernador del estado de Indiana, que tiene una importanbte industria en ese rubro.
La decisión promete polémica porque los cerdos norteamericanos suelen tener el SÃndrome Reproductivo y Respiratorio Porcino -PRRS-, una enfermedad también conocida como "enfermedad de la oreja azul", que no existe en la Argentina y si los controples fallan podrÃan traerla al paÃs.
Por eso varias provincias, como reveló LPO, ya han anunciado que prohibirán el ingreso de carne de cerdo de Estados Unidos a sus territorios. La probación definitiva se logró luego que los nortemaricanos acordaran una serie de procedimientos de control sanitario en las plantas que exporten a la Argentina.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
