Alberto Fernández sorprendió este miércoles por la noche en la Legislatura de Santa Fe al anunciar que la Hidrovía Paraná-Paraguay, cuya concesión vence en 2021, pasará a manos de las provincias "que tienen la Hidrovía y usan la Hidrovía".

 [La licitación de la Hidrovía plantea un desafío a Alberto Fernández]

Fernández viajó a Santa Fe para presenciar la jura del nuevo gobernador de la provincia, Omar Perotti quien lo recibió en las escalinatas de ingreso de la Legislatura provincial junto al ex gobernador, el socialista Miguel Lifschitz, para participar del acto protocolar.

En una de las definiciones más importantes de sus primeras 24 horas como presidente, Fernández se anticipó en tratar uno de los puntos álgidos para el complejo agroexportador, uno de los más importantes del mundo, que es el destino que tendrá la red fluvial por donde se despachan casi el 80 por ciento de las exportaciones nacionales.

En 2021 vence la concesión que está en manos del consorcio integrado por el empresario radical y dueño de Emepa, Gabriel Romero y el gigante belga de dragados Jan de Nul desde hace más de 25 años y varios de los principales jugadores internacionales tenían su atención puesta en el nuevo proceso licitatorio.

El tema es de fundamental trascendencia y trata de un recurso estratégico para el país. Fernández así lo entendió y fue el único asunto puntual que tocó en los pocos minutos que duró el discurso que ofreció a la Asamblea Legislativa de Santa Fe, reunida para la jura del nuevo gobernador, Omar Perotti.

"Lo que más hablamos con Omar es que la hidrovía sea gobernada por las provincias que tienen la hidrovía y usan la hidrovía", adelantó el presidente sin mayores precisiones pero que claramente significaría que la administración, mantenimiento y prestación de servicios correría por cuenta de los distritos.

De ser así, significaría ingresos multimillonarios para la provincia de Santa Fe donde están establecidos los principales puertos del complejo agrícola exportador. Sin embargo, Fernández aclaró inmediatamente que los recursos obtenidos serían coparticipables.

 Lo que más hablamos con Omar es que la hidrovía sea gobernada por las provincias que tienen la hidrovía y usan la hidrovía 

"Así como entendimos eso con Omar, vamos a trabajar para que Santa Fe ayude a otras provincias para desarrollarse más porque lo están necesitando", advirtió. Previamente había dicho que "Santa Fe es una provincia muy rica, con un enrome potencial agrícola, ganadero e industrial pero que es parte de la Argentina integrada", para despejar dudas.

El ex ministro de Transporte Guillermo Dietrich había tratado, en los últimos meses del mandato, acelerar la confección de los pliegos para el llamado a licitación del servicio de dragado y balizamiento del río.

La idea era poder formalizar al menos el llamado a licitación internacional pero la causa de los cuadernos, que tuvo a Gabriel Romero en el centro de la escena, puso freno de mano a las intenciones de Dietrich.

Según la denuncia del chofer de Baratta, el radical habría hecho aportes por 600 mil dólares cuando se negociaba la extensión por 10 años más la concesión en 2010 lo cual obtuvo en ese momento gracias a un decreto de Cristina Kirchner.

La situación fue reconocida judicialmente por Romero, y derivó en denuncias presentadas contra el gobierno de Cambiemos por no revocarle el contrato, como se instruye en la Ley de Administración Pública.

Por tal motivo, en el mercado consideraban un hecho que Emepa no se presentara en la nueva licitación, confirmaron en su momento a LPO fuentes al tanto de la situación. Ahora, con el anuncio de Alberto de entregar la concesión a las provincias costeras cambia radicalmente.