El mercado inmobiliario tuvo un derrumbe estrepitoso como consecuencia de la pandemia. Durante el mes de mayo se registró un desplome histórico que llega casi al 95% respecto del mismo mes del año pasado.

Según estadísticas elaboradas por el Colegio de Escribanos de la provincia en el quinto mes del año se registraron un total de 407 escrituras frente a las 7.725 de mayo del año pasado.

La actividad inmobiliaria venía con casi dos años de retracción. Las escribanías y las inmobiliarias cerraron el 20 de marzo cuando Alberto Fernández estableció el aislamiento obligatorio. Recién en mayo se habilitó la actividad, con algunas restricciones, sin embargo el mercado registró una brutal caída.

A su vez, los montos totales muestran una variación negativa del 89% con respecto a mayo de 2019. Fue de $1.980 millones en 2020 en comparación con los casi $18.000 millones del año pasado, de acuerdo al relevamiento de los escribanos bonaerenses. El valor del acto de compraventa en promedio fue de $4,9 millones y tuvo un alza interanual del 109%. El año anterior había sido de $2,3 millones.

De las 407 operaciones de compra de inmuebles, solo 19 se realizaron a través de créditos hipotecarios, lo que representa una disminución del 97,3% con respecto al mismo mes del año pasado, cuando se acumularon 694 hipotecas.

"La disminución pronunciada de los valores registrados durante mayo está en relación directa con las restricciones impuestas a la actividad de los escribanos ante el coronavirus. Por tal motivo, las autoridades del Colegio de Escribanos continúan realizando todas las gestiones pertinentes ante los gobiernos provincial y nacional para lograr la rehabilitación plena de la actividad notarial en la totalidad de los municipios bonaerenses", detallaron desde esa institución a través de un comunicado.

Según explican a LPO desde el colegio, en abril la caída en la actividad no tuvo precedentes toda vez que se realizó una operación de compra-venta y tres hipotecas en todo el territorio bonaernese.

Desde la institución destacan dos variables para explicar la crisis. Por un lado la fuerte retracción económica que genera la incertidumbre en un contexto de pandemia a nivel mundial. Y por otro la imposibilidad de operar en el Conurbano, donde las escribanías permanecen cerradas.

En el ámbito provincial, el servicio de escribanía funciona sin inconvenientes en la mayoría de los distritos del interior, pero no en los 40 distritos que conforman el Conurbano.

En tanto, aunque algunos servicios para la compra-venta y alquileres de propiedades ya están habilitados, total o parcialmente, en varias jurisdicciones, esta semana se conoció el dato de que ocho de cada diez inmobiliarias no pudieron cerrar ninguna operación durante mayo.

El número fue relevado por el Observatorio Inmobiliario de la Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios (Camesi) entre más de 3.200 operadores del sector.

La mayoría de los operados inmobiliarios consultados por la cámara aseguró que continúa sin concretar ningún tipo de operación, a pesar de que en algunas jurisdicciones se retomó la actividad. En el rubro de compra-ventas, apenas el 18% de las inmobiliarias cerró una operación. En abril lo había hecho el 7 por ciento.