La convivencia pacÃfica entre el oficialismo porteño y el kirchnerismo se resquebrajó luego de que el Frente de Todos quedara cerca de perder sus representantes en el organismo que diseña las polÃticas urbanÃsticas de la Ciudad. Desde la oposición advirtieron en los últimos meses el organismo validó irregulares decisiones del gobierno porteño en favor uno de los principales estudios de arquitectura porteños.
El Consejo del Plan Urbano Ambiental (CoPUA) es el organismo capitalino que establece los lineamientos urbanos para la Ciudad con la mirada puesta en el futuro. Además se encarga de admitir o rechazar excepciones al código como rezonificaciones o cambios de uso para terrenos particulares.
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Con dictamen mayoritario el oficialismo propuso a los futuros integrantes del CoPUA, que no tendrá representación peronista sino que contará con cinco miembros de Vamos Juntos (3 del PRO, uno de la Coalición y otro de Confianza Pública), dos de del radicalismo y uno del GEN y Consenso Federal.
"Es una provocación, porque si bien la Ley no establece proporcionalidad hasta ahora siempre se habÃa respetado la representación en el parlamento", dijo a LPO Javier Andrade. "Cuando tenÃamos un interbloque de 13 diputados hubo 3 representantes en el CoPUA ¿y ahora que somos 17 no vamos a tener ninguno?", se preguntó el Vicepresidente del bloque del Frente de Todos.
En el oficialismo aseguran que actuaron conforme a lo que establece la ley, que no determina una proporcionalidad en el organismo, sino que los representantes surgen en base a acuerdos polÃticos. Y que habÃan ofrecido tres lugares, algo que el peronismo rechazó.
Si bien en el larretismo no le cierran la puerta a la posibilidad de incluir un integrante del PJ, creen que será difÃcil modificar la decisión de la Comisión de Planeamiento y la Junta de Ética que aprobó los pliegos en un plenario. Aseguran que es la única forma de darle representación a los partidos más pequeños.
En el peronismo consideran que la pérdida de representación es un "castigo" por las últimas votaciones del FDT, que decidieron no acompañar las propuesta del oficialismo. "Somos la verdadera oposición", dijo Andrade.
"No es casual que se quiera frenar la participación del Frente de Todos en el COPUA cuando hay una clara controversia entorno a qué debemos hacer con la tierra de los porteños. Si tiene que estar al servicio del buen vivir y de la especulación inmobiliaria", dijo el diputado Juan Manuel Valdés. El legislador no integra la comisión de Planeamiento y estuvo allà a pedido del jefe de bloque Claudio Ferreño, un albertista puro. Según dicen en el peronismo, Alberto Fernández no acuerda con la polÃtica de venta de tierras públicas que implementó el macrismo y buscará frenarla.
Fuentes del sector recordaron que en los últimos meses pasaron controvertidos expedientes por el CoPUA. Desde fines del año pasado que el peronismo se habÃa quedado sin representantes en el organismo luego del cambio de gobierno: algunos asumieron funciones ejecutivas y otros se corrieron por motivos personales.
Entre esas carpetas hay una para instalar una estación de servicio frente al Aeroparque Metropolitano, otra para rezonificar un terreno de 13 mil metros cuadrados que pertenecÃa a Transportes Plaza y una tercera para un complejo de viviendas de lujo a cargo del estudio Bodas-Miani.
Como explicó LPO, BMA (Bodas-Miani-Anger) es uno de los estudios que mayor cantidad de excepciones urbanÃsticas consiguió en los últimos años en Puerto Madero. Tanto es asà que en el mundo de la arquitectura se refieren a la zona como "el Distrito Bodas Miani".
Años atrás el estudio habrÃa intentado realizar un convenio urbanÃstico con la Ciudad para que les permitieran construir más altura de la permitida en un terreno de Sucre y Figueroa Alcorta, una de las zonas más exclusivas de la Ciudad. El convenio fue retirado del paralamento capitalino porque no hubo acuerdo polÃtico para tratarlo, pero la carpeta fue por otra vÃa.
El estudio decidió presentarse a la SubsecretarÃa de Interpretación UrbanÃstica, en ese momento a cargo de Rodrigo Cruz. La disposición 560/20 que habilitó el proyecto salió el 27 de marzo de la dependencia de Cruz, que ese dÃa dejó de ser funcionario porteño.
Las opiniones están divididas: fuentes del sector aseguraron que se trató de una decisión "a medida de BMA". Desde el gobierno aseguraron que "la normativa del barrio es U23. Ahora, se considera aplicable el ‘Perfil Edificable' del cuerpo principal del Código UrbanÃstico, en asimilación a la altura máxima de la Unidad de Sustentabilidad de Altura Alta, por lo que propone alcanzar un plano lÃmite de +27 metros". Como la Avenida Figueroa Alcorta permite esa altura, no consideraron que no habÃa inconvenientes.
Otras fuentes aseguraron a este sitio que la altura máxima permitida para el edificio es de 20 metros según el nuevo código y no los 28,40 que habrÃa permitido la SubsecretarÃa. De hecho cuando BMA compró el terreno, la altura máxima permitida era 10 metros y hablan de una plusvalÃa de más de 20 millones de dólares.
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