La tensión entre los docentes y el gobierno porteño escala luego de que la ministra de Educación Soledad advirtiera que descontarían el día de sueldo a los maestros que hagan retención de tareas a partir del 17 de febrero. Desde los sindicatos piden información detallada sobre los protocolos que van a implementarse y parece poco probable que haya presencialidad a partir del inicio de clases.

"No discutamos si va a haber paro o no sino cómo va a ser la presencialidad. Queremos que nos cuenten cómo van a garantizar el transporte, las burbujas, la conectividad de los chicos que tienen que tomar clases virtuales. Pero como no lo tienen claro salen con estas bravuconadas", se quejó Guillermo Parodi, Secretario adjunto de UTE ante la consulta de LPO.

Punto por punto las dudas del regreso a clases en la Ciudad

El gremio es el más importante de la Ciudad y, junto a Ademys, uno de los mayores opositores al anuncio que dio Horacio Rodríguez Larreta la semana pasada. El alcalde porteño aseguró que el 17 de febrero comenzarían las clases presenciales en los ciclos iniciales de jardín, primaria y secundaria, pero no hubo mayores detalles de cómo sería el regreso a las aulas.

Por el momento parece poco probable que las clases comiencen el 17 de febrero. En el cronograma que diseñó la Ciudad, los docentes y personal administrativo regresan el 8 de febrero a su trabajo y solo tendrían 5 días para preparar la logística de las escuelas, ya que en el medio hay un fin de semana y dos días por los feriados de carnaval.

"Lo que hemos decidido, también aprendiendo del caso de España, es que la burbuja puede ser el grado, o la sección en secundaria, eso como criterio de agrupamiento, que no quiere decir criterio de organización. No quiere decir, como están diciendo algunos gremios para generar miedo a las familias, que vamos a hacinar a 30 chicos adentro de las aulas, lo que quiere decir es que la burbuja, en caso de aislamiento, va a ser el grado, que pueden estar juntos en algún momento, pero puede ser que en otro momento estén separados", dijo Acuña a radio Mitre.

"Dicen que habrá retención de servicios, pero es una medida de fuerza y cada vez que hay una medida de fuerza, al docente que no trabaja sin tener una licencia justificada se le descuenta el día", había advertido la ministra.

En UTE pusieron como ejemplo una escuela que Acuña junto a Diego Santilli visitaron la semana pasada. Según aseguran, en la Alejandro Volta no hay aulas con ventilación al exterior y plantean que en ese contexto es muy complicada la vuelta a la presencialidad.

"Ellos pretenden quedar como que los que no quieren que volvamos son los docentes. Nosotros queremos volver, pero también cuidar a las familias de los estudiantes y los docentes", dijo Parodi antes de plantear sus dudas para la implementación de los protocolos de transporte público, donde en teoría docentes y alumnos tendrían prioridad.

"Por cada chico que va al baño, según el protocolo al que adhirió la Ciudad, se requiere una persona para limpiarlo, ¿cómo van a hacer para que se cumpla? Es impensable dar clases con 30 alumnos en un aula, esa situación no respeta ningún protocolo ni del gobierno, ni de la ONU, ni de nadie. En el caso en que la clase la dé un docente con 10 alumnos, ¿a los otros 20 quién les da la clase virtual?", se preguntó Parodi.