"Vine decidido a terminar con la suba de precios". Asà lo indicó este domingo el Presidente Alberto Fernández en una entrevista que concedió a C5N tras la gira por varios paÃses de Europa en la que se reunió con los mandatarios de Portugal, España, Italia y el Papa Francisco.
"Me preocupa mucho porque es inexplicable, sinceramente no hay ninguna razón, más que el aumento del consumo, para explicar esos aumentos que se dieron en marzo y abril", señaló el Presidente en referencia a la inflación del 4,8% y 4,1% registrados en dichos meses.
En rigor, según pudo saber LPO, en la Casa Rosada se analizan una serie de medidas para intentar contener la suba de los alimentos que vienen superando la inflación promedio. Algunas de las decisiones, aparentemente, se irán anunciando durante el transcurso de los próximos dÃas.
La primera medida, al parecer, serÃa activar las Declaraciones Juradas de Exportaciones de Carnes (DJEC) mediante las cuales los frigorÃficos que exporten deben gestionar una triple autorización estatal: una en la Aduana, otra en la ex ONCCA y la última en la SecretarÃa de Comercio Interior.
AsÃ, recreando los ROEs, el Gobierno pretende restringir las exportaciones de carne vacuna que alcanzaron las 278.000 toneladas durante el primer cuatrimestre del año. El número superó el récord histórico de igual periodo de 2020 cuando se enviaron al exterior 245.000 toneladas.
"Yo celebro que se exporte carne. Lo que no celebro es que los argentinos paguemos la carne lo mismo que en Europa", señaló Alberto. El dilema que existe es que las exportaciones son una importante fuente de generación de divisas (más de 3.000 millones de dólares por año).
En el ala kirchnerista del Gobierno aseguran que los acuerdos de precios no tendrán impacto alguno sobre el consumo. Es que los frigorÃficos van a destinar apenas 8.000 toneladas por mes a "precios accesibles" sobre un consumo interno que ronda las 200.000 toneladas mensuales.
La propuesta de Vallejos para crecer: cupos a la carne, suba de salarios y más retenciones al maÃz
Los principales cortes de carne vacuna aumentaron por encima de la inflación en los últimos 12 meses. El asado subió un 81,5%, el matambre un 76,6%, la tapa de nalga un 65,6%, el lomo un 62,5%, la picada un 61,5% y el osobuco un 60,2%, según datos oficiales.
La otra pata de las medidas oficiales serÃa la extensión hasta las elecciones del Programa "Precios Máximos". De hecho, el viernes pasado Paula Español extendió hasta el 8 de junio próximo dicho programa, aunque con algunos productos que fueron excluidos de la lista.
También se están monitoreando con rigor las exportaciones de trigo y maÃz. En el caso del cereal, al Gobierno le preocupa el aumento que viene registrando el precio del pan. Un informe de Confederaciones Rurales indicó que el trigo incide en apenas un 12,6% del precio final del pan.
"Si tomamos todo el abanico de panificados, la incidencia del trigo se reduce al 7%. Se viene la campaña fina y la intención de siembra dependerá de las expectativas que tengan los productores sobre las decisiones que tome el Gobierno", advirtió a este medio Jorge Chemes, presidente de CRA.
Por el lado del maÃz, tal como contó LPO, el precio interno aumentó un 180% en el último año complicando la ecuación de rentabilidad a los productores de cerdo y los feedlots que utilizan el grano como principal insumo de alimentación para los animales.
La suba del maÃz jaquea la producción de cerdo y los feedlots
Una de las opciones serÃa aumentar los derechos de exportación a ambos cultivos que actualmente se ubican en un 12%. La Casa Rosada tiene la posibilidad de subir el impuesto hasta el 15% sin necesidad de pasar por el Congreso (cualquier alÃcuota superior debe pasar ese filtro).
El fin de semana varios referentes del kirchnerismo se quejaron, de manera sorpresiva por las redes, por la suba de precios de los alimentos. Esto fue leÃdo como una presión manifiesta de este sector de la coalición de gobierno al Presidente para que intervenga los mercados.
La idea del kirchnerismo es planchar los precios de cara a las elecciones de septiembre y noviembre. Dirigentes cercanos a Cristina cuentan el malestar de la vicepresidenta por el descontrol de la inflación en la previa de lo que será la definición de la composición del ámbito legislativo.
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