Envalentonada por los resultados de las Paso, la izquierda busca un resultado estratégico: arrebatarle votos al kirchnerismo en dos sectores en los que viene perdiendo fuerza, los barrios populares y los de profesionales progresistas.

En toda la provincia, el Fitu cosechó 4,32 por ciento y quedó a casi 7 puntos del kirchnerismo, pero en la ciudad de Córdoba la izquierda llegó a 6,35, a sólo dos puntos del Frente de Todos.

El Fitu superó al kirchnerismo en 20 barrios de clase baja de la ciudad de Córdoba, entre ellos Ciudad Evita, Ciudad de Mis Sueños y Ciudad Angelelli, planes de viviendas sociales creados por el Gobierno provincial en la última década. En otra veintena de barrios populares, la diferencia a favor del Frente de Todos fue de menos de un punto.

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Para concretar este objetivo estratégico, el Fitu planea en esos barrios un "timbreo" masivo liderado por sus candidatas. "El casa por casa está en nuestra esencia de campaña", dice a LPO Liliana Olivero, cabeza de lista en el tramo Diputados.

Luego, creará células barriales con adherentes en los barrios donde el Fitu no tiene locales o comedores una suerte de "inorgánicos" a los que les proveerán votos y recursos, con la apuesta de sumar fiscales.

Para Olivero, "la enorme decepción con el Gobierno nacional" de los votantes kirchnerismo más "las propuestas respecto del no pago de la deuda y de la reducción de la jornada laboral" hacen un combo atractivo para sectores no peronistas que apoyaron en 2019 a Alberto Fernández. A esto, suma a su discurso, "la falsa grieta que se pone de acuerdo para ajustar al pueblo".

El Frente Patria Grande que lidera Juan Grabois coincide en Córdoba con las críticas al kirchnerismo que hace la izquierda. "La lista del Frente de Todos no expresó la heterogeneidad de la coalición, priorizando viejas y rancias figuritas repetidas de la política", afirmó Constanza San Pedro.

La lectura de Olivero coincide con la que realizó Constanza San Pedro, referente en Córdoba del Frente Patria Grande (Grabois), quien dijo que "la lista que llevó el Frente de Todos a las Paso no expresó la heterogeneidad de la coalición, priorizando viejas y rancias figuritas repetidas de la política y de construcción personalista".

Ante esto, San Pedro reconoce que "muchos cordobeses terminaron optando por opciones de izquierda, especialmente en Capital".

En este punto, Olivero sostiene: "Entendemos que por la decepción de antiguos aliados del kirchnerismo, podremos aumentar votos con esos sectores" dice respecto de los progresistas defraudados del Gobierno de Fernández.

Apunta a votantes de, por ejemplo, Barrios de Pie, que en sectores bajos promedió un punto de los votos. También descuentan que los votantes del MAS terminarán aportando votos al Fitu.

En relación a la cuitas entre las distintas facciones del Fitu, Olivero sostiene que el acuerdo de rotación de bancas es una garantía para que todos los partidos que integran la coalición trabajen en este elección. Este sistema funciona aceitadamente en la Legislatura provincial desde hace varios años, y desde 2019 en el Concejo Deliberante de la Ciudad, en la primera banca que logró la izquierda.

"Además de los casa por casa en los barrios, apuntamos al electorado de las fábricas, y haremos un esfuerzo por hacer actos en cada una de ellas", dice Olivero.