En medio de su indagatoria, Amado Boudou metió la primera baza que apunta directamente a enredar a Daniel Scioli con el caso Ciccone. Con toda intencionalidad le solicitó al juez como medida de prueba que “curse oficio a la Anses, a la Camara de Diputados y a la Camara de Senadores de la Nacion para que indique la historia laboral del señor Gabella y de haber sido empleado contratado en las cámaras, para que indiquen a cargo de que legislador o autoridad política trabajó”.

Boudou sabía muy bien lo que pedía, aunque la jugada difícilmente trascienda el nivel de mensaje político cruzado en el expediente. Es que Gabella, de larga trayectoria en la Ucedé y el PJ porteño antes de sumarse a Boldt, trabajó tres meses con Daniel Scioli en la Comisión de Deportes de la Camara de Diputados en 1998, en el primer año de Scioli como diputado nacional por la Capital.

De hecho, en su testimonio en la causa, Gabella confirmó que conocía al lobbysta Lautaro Mauro, cercano al actual gobernador, des la época de la primer campaña política de Scioli.

Gabella fue consejero vecinal electo por la circunscipción 17 del 91 al 95 y durante la Convención que redacto la Constitución porteña, fue designado secretario Parlamentario del bloque del PJ, a propuesta de los entonces convencionales Martín Redrado y Jorge Castells.