En medio del conflicto de los Camioneros con el Gobierno Nacional, los gobernadores cercanos a la Casa Rosasa Salieron en bloque a expresar su apoyo a Cristina Kirchner y, al mismo tiempo, a pedir "racionalidad" a los planteos de Hugo Moyano. Los mandatarios de Río Negro, Mendoza, Chacho y Entre Ríos, entre otros, ya opinaron. En el Gobierno Nacional todavía esperan alguna declaración pública de Daniel Scioli, quien se mantiene en silencio.
Alberto Weretilneck, gobernador de Río Negro, cuestionó los alcances del paro que lleva adelante el gremio de los camioneros, y sostuvo que "el reclamo de un sector no puede estar por encima del bienestar de toda la sociedad".
"Estamos de acuerdo con las reivindicaciones laborales de los empleados en general, porque es un derecho que le asiste a todos los trabajadores, pero no podemos avalar esta medida de fuerza que pone en jaque al país y a nuestra provincia en particular", dijo el mandatario en declaraciones a la prensa local.
El titular del Poder Ejecutivo de Entre Ríos, Sergio Urribarri, afirmó que "dejar al país sin combustibles es
un acto que sobrepasa cualquier tipo de reclamo sectorial y genera decenas de situaciones que ponen en riesgo la tranquilidad pública y, en situaciones extremas, quizás puede ser que hasta la vida de algunas personas".
Antes de ingresar a su despacho, el mandatario hizo un llamamiento para "que la dirigencia de camioneros" revise su postura: "Más allá de las cuestiones que se dirimen en las paritarias, ha sido el sector que más aprovechó el crecimiento del país provocado por este modelo y este gobierno”.
Desde Chaco, Jorge Capitanich llamó a la "sensatez y la cordura" del Sindicato de Camioneros que conduce Hugo Moyano, al advertir que "no hay ninguna razonabilidad en la medida extrema" que lanzó vinculada al "bloqueo de las plantas de combustible" en todo el país.
Capitanich anunció, además, que la dirigencia peronista promoverá "rápidamente" una convocatoria de la Comisión de Acción Política del Consejo Nacional del Partido Justicialista para emitir un documento en "solidaridad" con la presidenta Cristina Fernández y en "respaldo absoluto" en todas las medidas oficiales adoptadas tendientes a garantizar el abastecimiento del combustible en el país.
Por su parte, el gobernador de Mendoza, Francisco "Paco" Pérez, advirtió que la situación en su provincia es "muy delicada" por la falta de combustible, y calificó de "descabellada" la medida de fuerza de Moyano porque "toma como rehenes a todos los argentinos".
"La destilería de Luján de Cuyo provee a 14 provincias de combustible, para el centro y norte del país. La situación es grave, ya que las estaciones de servicio de la provincia, en su mayoría, no tienen combustible", detalló el mandatario kirchnerista.