El pasado 10 de agosto el ministro Hernán Lorenzino y el viceministro de Economía Axel Kicillof anunciaron un aumento del derecho de exportación nominal del biodiesel del 20% al 32% (aunque en términos efectivos la retención pasó del 14% al 24%).

A poco más de un mes de ese anuncio –publicado en el Boletín Oficial-, dicho aumento de retenciones comenzó a hacer prácticamente inviable el negocio para las Pymes argentinas en un contexto internacional de precios en descenso para el biodiesel.

Por tal motivo, según contaron a La Política Online diversas fuentes del sector, en los últimos días varios empresarios plantearon a los máximos funcionarios del Gobierno nacional la preocupación existente en el mercado por la paralización de la producción.

De esta manera, el tema tomó tinte político y el ministro de Planificación Julio de Vido encomendó al secretario de Energía Daniel Cameron que tome cartas en el asunto para solucionar los problemas que trajo el aumento de retenciones propuesto por Kicillof.

De Vido y Cameron –dos de los máximos promotores de esta industria que nació en 2007- comenzaron a ver distintas alternativas para evitar que los principales perjudicados por la intervención sean justamente las Pymes de capitales nacionales.

Así las cosas, y luego de varias conversaciones, los funcionarios oficiales propusieron a un grupo de empresarios locales implementar un sistema de retenciones móviles ajustable cada 15 días con un piso vigente en el 17%.

“Esto, al lado del tremendo aumento de retenciones que fijó Kicillof, es un mal menor que en el actual contexto de precios bajos nos vendría bien”, admitió a LPO un importante empresario que participó de las negociaciones con Cameron.

Como sea, lo cierto es que, al parecer, ya estaría todo listo para que la propia Cristina Kirchner haga el anuncio este miércoles a última hora de la tarde en la Casa Rosada ante la presencia de los máximos referentes del sector de biocombustibles.

En este contexto, en lo que va del presente mes de septiembre las ventas externas de biodiesel se derrumbaron (se declararon poco más de 20.000 toneladas), al tiempo que los precios internos del producto cayeron de $ 5.195 a $ 4.405 por tonelada.

En tanto, en agosto pasado se declararon exportaciones por casi 143.000 toneladas de biodiesel, mientras que en el mismo mes de 2011 se habían registrado exportaciones por un volumen de 170.000 toneladas (la caída responde al aumento de retenciones).

En la actualidad, en la Argentina operan unas 30 plantas de biodiesel localizadas en el interior del país con una capacidad instalada cercana a las 3,5 millones de toneladas, empleando a 2000 personas de manera directa y unas 4000 de manera indirecta.