La Cámpora en Mercedes jugó en contra de Martín Insaurralde, el candidato elegido por Cristina Kirchner para competir con Sergio Massa. La decisión se tomó en plena pelea por las primarias cuando los jóvenes camporistas se sintieron desplazados de la campaña encabezada por el intendente de Lomas de Zamora.

Por eso apuntalaron el corte, una vieja manera de marcar supremacía político territorial, que en este caso consistió en desestimar la boleta de Insaurralde en el cuarto oscuro y votar al candidato local Juan Ignacio Ustarroz, para que saque algunos votos más que el elegido de Cristina.

Ustarroz es el hermanastro del también mercedino Eduardo “Wado” De Pedro, el verdadero jefe de La Cámpora y uno de los hombres más escuchados por la Presidenta.

Gracias a esta maniobra Ustarroz logró sacar más de 1.400 votos -casi un 20 por ciento más- que el candidato a diputado nacional del Frente para la Victoria. Tamaña diferencia no sorprendió al peronismo local, donde no era un secreto que el camporista promovió cortes con la boleta de Sergio Massa, en una búsqueda de potenciar a su hermanastro con algo del voto del Frente Renovador.

Esta comprobación sumió en perplejidad al kirchnerismo que no sale de su asombro ante la maniobra de Wado De Pedro. Es que allí el influyente diputado siempre se mostró como uno de los más ultras del cristinismo y gran promotor de la faceta policial de La Cámpora que suele alimentar la mirada conspirativa de la Presidenta.

Lo notable es que a pesar de esta maniobra, una vez más De Pedro y Ustarroz fueron derrotados por el intedente Carlos Selva que integra la red de jefes comunales alineados con Massa. Selva aplastó a los camporistas superando un 38% de los votos contra un 25% de Ustarroz.

Así, los millones que destina el gobierno nacional a Mercedes volvieron a resultar infructuosos. Ya en 2011, intentaron desplazar de la intendencia a Carlos Selva y la movida fracasó. El intendente les ganó a los camporistas todas las últimas elecciones, pese a que Ustarroz en las distintas campañas -incluída esta última- contó con el apoyo d ela primera línea del Gobierno que hizo campaña en esta pequeña localidad bonaerense, como si estuviera en juego una provincia clave.

Y la nueva derrota se consumó pese a que De Pedro y su hermanastro también cuentan con el respaldo de su tío, el diputado provincial Claudio España, propietario del Molino Cañuelas y hombre de fortuna -que se acrecentó en el kirchnerismo en donde tiene buenos contactos con Julio de Vido y Guillermo Moreno-. De hecho, la industria molinera ha sido una de las grandes beneficiadas del "modelo" kirchnerista a expensas de los productores.

España, Ustarroz y De Pedro, representan en los hechos el patriciado rural de Mercedes, muy lejos d ela imagen revolucionaria que gusta promover a los camporistas.

Es por eso que para este trío, éstas primarias eran una especie de revancha. Pensaron que era su hora de derrotar a Selva que harto de las conspiraciones camporistas se pasó a las filas de Massa.

Sin embargo fueraon una vez más derrotas. En los fríos números, Ustarroz obtuvo 11.377 votos contra 9.966 de Insaurralde. Es decir, hubo un corte de boleta en contra del candidato elegido por la Presidenta.