La Presidenta había responsabilizado ayer a las empresas de cable de ser las causantes de la inflación por el aumento de los abonos, además de cuestionar el “monopolio” de la fusión de las firmas Cablevisión y Multicanal.

Hoy la respuesta provino de la entidad que núclea a esta actividad, que rechazando otro de los concetos de Cristina Kirchner aclaró que las emisiones de televisión que por cable no son consideradas como servicio público "ni aquí ni en el mundo".

Este había sido el concepto de la Presidenta que causó profunda preocupación en la industria del cable cuando definió esta actividad “casi” como un servicio público, lo que abriría la puerta a mayores regulaciones, una actividad que atrae particularmente al kirchnerismo.

Para las empresas, según informaron en un comunicado, la actividad no puede encuadrarse jurídicamente en esta categoría, ya que "no utiliza infraestructuras ni redes públicas" y tampoco se trata "de una prestación esencial como la electricidad, el agua, el transporte o la telefonía".

En cuanto al impacto inflacionario, la ATVC explicó que "el cable viene actualizándose claramente por debajo de la inflación" y ejemplificó que en 2007, los abonos se ajustaron "entre 10% y 15%, cuando las mediciones independientes de inflación se ubicaron en torno a 22%", mientras que otros consumos y servicios prioritarios del hogar "tuvieron aumentos superiores a 30%".

La Cámara empresaria señaló también que la industria está tratando de atenuar "el impacto de sus costos e insumos (laborales, de programación, equipamiento y gravámenes,) que en el mismo período se incrementaron entre 20% y 40%".