A una semana de las PASO, la mayoría de las encuestadoras daban como ganador a Agustín Rossi por sobre Marcelo Lewandowski, la lista que cerraron Omar Perotti y Cristina Fernández, un resultado que hubiese producido un fuerte golpe institucional ya que el gobernador se anotó como candidato suplente para que no queden dudas de su aval.

Una derrota de la lista oficialista hubiese abierto interrogantes sobre el destino institucional en la segunda mitad del mandato, sobre todo si se tiene en cuenta que en Santa Fe no está permitida la reelección del principal mandatario.

Pero la imagen de un David que a fuerza de militancia derribaba al Goliat que formaron Perotti y Cristina se esfumó el domingo luego del triunfo aplastante de Lewandowski que duplicó a Rossi con 331.075 contra 163.501 votos.

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De los informes que circularon días previos que fueron publicados por este medio, la única consultora que no solo dio como ganador al candidato de Perotti sino que también advirtió que la lista oficial duplicaba a la del ex ministro de Defensa, fue la de Aresco.

En diálogo con La Política Online, su titular Federico Aurelio explicó que la diferencia de pronósticos puede producirse por una sumatoria de factores sobre la manera en que se pregunta o la metodología que se aplica.

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En el caso de Aresco, las encuestas las hicieron por el sistema CATI -Computer Assisted Telephone Interviewing, que consiste en una indagación telefónica pero con un operador desde el principio de la charla hasta que finaliza el cuestionario "donde se genera una mayor contención del entrevistado, con operadores capacitados y que tiene menos cortes que los sondeos hechos con máquinas", sostuvo Aurelio.

 La imagen de un David que a fuerza de militancia derribaba al Goliat que formaron Perotti y Cristina se esfumó el domingo luego del triunfo aplastante de Lewandowski que duplicó a Rossi con 331.075 contra 163.501 votos

Es que el tema metodológico pudo haber sido un factor determinante en la exactitud de los informes ya que la mayoría de los encuestadores que predijeron el triunfo de Rossi, lo hicieron por sistema IVR, de discado automático con cuestionarios informatizados que en un contexto donde la población manifiesta poca predisposición, pueden generar resultados menos confiables como en este caso.

Además, la pandemia impidió que las consultoras trabajen con entrevistas presenciales, que además son mucho más costosas, y en ese sentido, el CATI puede ser la que refleje con mayor exactitud las intenciones del electorado.

Respecto a los frentes, Aurelio anticipó un triunfo de Juntos por el Cambio con poco más de 36 puntos contra el 32% del peronismo que terminó siendo de 40 a 30. En Cambiemos, la encuestadora ubicó a la lista de Angelini arriba con 12 puntos seguido por Carolina Losada y Maximiliano Pullaro muy cerca con 10.

Carolina Losada en los festejos de su lista que se impuso en Juntos por el Cambio

En rigor, Angelini terminó tercero superado por Losada y Pullaro que entre ellos hubo una diferencia mínima: "en Cambiemos advertimos una paridad total y el único que aparecía un escalón más abajo era José Corral, lo que terminó siendo así", señaló Federico Aurelio y agregó que la diferencia entre candidatos, se ubican dentro de los márgenes de error que era de un +/-3%, según el informe técnico.

En rigor, la mala performance de José Corral, que ya tiene tres campañas provinciales encima, sorprendió a todo el arco político como también la posición que logró el radical Maximiliano Pullaro que fue ministro de Seguridad de Lifschitz y que saltó a Cambiemos luego del fallecimiento de Lifschitz.