Curiosa situación se vivió este lunes en la Cámara de Diputados santafesina, cuando la legisladora nacional Lucila Lehmann decidió revocar su pedido de juicio político contra Marcelo Saín y aprovechó la ocasión para despacharse con duras críticas hacia el Frente Progresista.

La interna de Cambiemos se puso en evidencia en una de las comisiones de relevancia institucional como la de Juicio Político, a la que Lehamnn acudió a fin de que ratificara (e incluso ampliara) su acusación contra Saín por las despectivas palabras vertidas en un audio filtrado hace varios meses.

Pero el asombro se apoderó de los presentes cuando la legisladora no solo desestimó su acusación -aduciendo inconsistencia por no estar más Saín en su cargo-, sino que además cuestionó de forma tajante al bloque político que más la acompañó en todo el proceso de denuncia.

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"Hoy los que critican (al gobierno de Omar Perotti) parece que se bañaron en agua bendita cuando fueron parte de pactos con el narcotráfico", tiró Lehmann, dejando atónitos a propios y extraños según lo publicado por Rosario 12.

Pero la diputada de la Coalición Cívica fue incluso más allá al sostener que el socialismo dejó una provincia "en descomposición" en materia de seguridad.

"Para saber si la gestión de Sain fue mala hay que compararla con algo, y la verdad que lo del gobierno anterior fue desastroso, porque ahí se instaló esta connivencia entre el delito y sectores de la policía, la política y el poder judicial", expresó.

Pero lejos de ser azaroso, este cambio de postura fue estratégicamente elaborado por la propia Elisa Carrió, quien no estaría muy conforme con el arribo de Maximiliano Pullaro a Juntos por el Cambio, confiaron a LPO fuentes al tanto de la interna macrista.

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Por eso las críticas estuvieron claramente apuntadas hacia el exministro de Seguridad de Miguel Lifschitz, cuya gestión es tildada por sus detractores de haber favorecido la connivencia entre sectores políticos y el crimen organizado, amparados en los diferentes juicios que involucran a muchos de sus funcionarios.

El rechazo a Pullaro abre así una nueva fisura en la coalición opositora, cuyas estructuras de alianzas se vienen debilitando desde que se filtraran las diferencias entre sus máximos referentes. En Santa Fe, este proceso fue precedido además por el cimbronazo político que supuso la muerte de Miguel Lifschitz.

A su vez, Lehmann fue señalada de haber utilizando frases estigmatizante cuando habló de que "Santa Fe es un narco-Estado", acusación que durante años mantuvo La Cámpora cuando hablaba de narcosocialismo.