La renuncia de Andrés Larroque a su banca para sumarse al gabinete bonaerense de Axel Kicillof abrió una disputa judicial por su reemplazo que tiene como protagonista a la jefa del Inadi Victoria Donda y podría dejar al bloque de Máximo Kirchner con un voto menos.

No es un tema nuevo: las bancas que dejaron los ministros Felipe Solá y Daniel Arroyo fueron judicializadas y hasta fue necesario un fallo de la Cámara Nacional Electoral para que asumiera Liliana Schwindt y se alistara al oficialismo.

Peleaba por su lugar Marcelo Díaz, ex ladero de Margarita Stolbizer, quien tampoco pudo sustituir a José Ignacio de Mendiguren, porque pidió licencia para asumir la presidencia la presidenica del Bice. No quiso renunciar para no dejarlo asumir. 

El otro diputado sustituto fue Jorge Sarghini, que se sumó al interbloque federal y estuvo entre los que no dieron quórum en la última sesión presencial y arriesgaron la ley para bajar jubilaciones a jueces y diplomáticos.

Donda pide que la diputada Souto reemplace a Larroque, pese a que la ley de paridad obliga a que fuera un hombre. Si la Cámara Electoral toma el amparo, podría quedar la banca vacía las próximas sesiones. 

Schwindt pudo asumir a partir de un fallo de la Cámara Nacional Electoral que determinó que a los renunciantes de las listas de 2017 debían reemplazarlos quienes siguieran en la nómina, sin importar el género.

Ocurre que recién en noviembre de ese año se sancionó la ley de igualdad, que obliga a intercalar las nóminas entre hombres y mujeres y respetar el género cuando haya reemplazos.

En las vacantes que se produjeron por las nóminas de 2019 sí se respetó la paridad y fue así como Juan Carlos Alderete, que fue el 23 de la lista, juró como diputado y no pudo hacerlo Natalia Souto, que figuró en el puesto 22.

Souto fue una militante de Libres del Sur de Vicente López y es muy cercana a Donda, quien la sumó a Somos, el partido que creó para volver al kirchnerismo y aliarse al frente de Todos con firma propia.

Esta mañana, Souto supo que tampoco podría jurar por Larroque y ya estaba viajando a Buenos Aires para asumir Lisandro Bormioli, un referente kirchnerista de Pergamino. Saltearía a Marina Moretti, 24 en la lista, ex senadora de la provincia y militante de La Cámpora.

Natalia Souto. 

Se trata de lugares que no fueron peleados y se rellenaron con militantes rasos, porque al momento de armarse las listas la expectativa no era ni por asomo que asumieran más de 20 diputados de la Provincia del Frente de Todos. 

Donda no se quedó quieta y envió a Souto a presentar un amparo en la cámara nacional electoral para asumir en lugar de Bormioli y si le hicieran lugar o llegara una notificación a Diputados antes de la próxima sesión, su juramento podría posponerse y complicar al bloque de Máximo Kirchner cuando tenga que juntar una mayoría simple. Sin este problema, necesita 10 aliados si entre los suyos hay asistencia perfecta y la última sesión demostró que no siempre es fácil tenerlos. 

En su presentación, Souto consideró que "la aplicación lineal de la ley de paridad género que, supuestamente se sancionó para facilitar y beneficiar la participación política de las mujeres, habilita de este modo situaciones de hecho, que objetiva y manifiestamente nos perjudican a las mujeres".

Un fallo de la Cámara Electoral le sumó una diputada al Gobierno y otra a Cambiemos

Consideró que la ley sancionada en 2017 intentó "corregir o mejorar la situación de determinados grupos o sectores sociales que históricamente han sido privados o se han visto perjudicados a la hora ejercer y gozar de determinados derechos, debido a situaciones de desigualdad estructural. En dichos casos, se encuentra justificado otorgar un trato diferencial o más favorable a aquellas personas que forman parte de un 'grupo desventajado'".

La norma citada se aprobó primero en el Senado, donde pasó inadvertida porque el cupo de tercios para las mujeres obliga a que la dupla que ingrese por la lista ganadora siempre sea con equidad de género. Pero los senadores, hábiles, colaron un artículos para que ningún reemplace deje a provincias con dos hombres y/o mujeres como había ocurrido en Santa Cruz entre 2015 y 2017, cuando Virginia García reemplazó al vicegobernador electo Pablo González.

En Diputados ese criterio no era relevante porque la paridad arriesgaba la reelección de muchos hombres que trababan su sanción. Fue posible por una arremetida de Donda, de madrugada, con la colaboración de Máximo Kirchner y Sergio Massa, por entonces en bloques distintos, pero con diálogo suficiente para juntar los votos que hacían falta. Ahora tienen que interpretar lo que hicieron para definir a los miembros de su bloque. Antes que lo haga la justicia.