Un ráfaga de balas disparadas contra el frente vidriado del Centro de Justicia Penal de Rosario, ocurrida a menos de 48 horas de que inicie un nuevo juicio contra Ariel 'Guille' Cantero, capo de Los Monos, volvió a ubicar a Rosario como la frontera caliente del narcotráfico en la Argentina.

No se trata de un caso aislado sino de una marca registrada del modus operandi de la banda narco que tiene a sus principales jefes presos pero conserva capacidad de operación para mantener el negocio del narcomenudeo, las extorsiones y el amedrentamiento a través de las balas. La misma dependencia ya había sido atacada en momentos previos que se inicien otros procesamientos judiciales que le complicaron la situación a Cantero, condenado a más de 50 años de prisión efectiva.

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De hecho, no se explica como a las 23.30 de este miércoles, dos desconocidos en moto pudieron acercarse sin problemas a la sede judicial, cuando aún había movimiento de vecinos en el parque que rodea al Centro Penal. Llegaron sin problemas, dispararon contra el frente del edificio y ese retiraron sin mayores inconvenientes, cuando se suponía que la sede estaba fuertemente custodiada porque informes de inteligencia de la policía provincial habían anticipado "riesgo alto" de un ataque, como el que finalmente ocurrió.

No se trata de un caso aislado sino de una marca registrada del modus operandi de la banda narco que tiene a sus principales jefes presos pero con la capacidad logística para mantener el negocio del narcomenudeo, las extorsiones y el amedrentamiento a través de las balas. 

Tan previsible era el ataque, que la policía había solicitado que la audiencia  a Cantero se realice de forma virtual para evitar el riesgo de ataques durante su traslado desde Marcos Paz a Rosario. 

Luego del ataque, la provincia dispuso un amplio operativo de seguridad con más de 250 uniformados y unos 60 vehículos para custodiar la sede penal.

Policía santafesina en la sede del Centro de Justicia Penal de Rosario, luego del ataque.

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De hecho, este viernes los fiscales David Carizza, Matías Edery y Luis Schiappapietra, imputarán a Ariel "Guille" Cantero por atentados a edificios públicos y domicilios particulares de magistrados y funcionarios judiciales que entendieron en causas anteriores y al mismo Concejo Municipal de Rosario recibió la furia de pistoleros anónimos.

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 El líder de Los Monos también será imputado por "instigar" el atentado a tiros al casino City Center que terminó en el homicidio de Enrique Encino, quien recibió una bala perdida en la cabeza mientras fumaba un cigarrillo en uno de los balcones del casino, en enero del año pasado.

La balacera se relacionó a una serie de maniobras extorsivas que Los Monos venían realizando sobre locales y negocios para obligarlas a pagar un canon por "seguridad", el tradicional negocio de la extorsión.

Cuando se comenzó a investigar el atentado al casino City Center, se dio con la punta del ovillo de una profunda trama criminal en la que se vinculaban altísimos funcionarios judiciales y un sector de la política santafesina. La investigación expuso al senador provincial Armando Traferri como uno de los organizadores de la red de juego ilegal que venían recibiendo la presión de Los Monos para participar del negocio. 

 Cuando se comenzó a investigar el atentado al City Center, se dio con la punta del ovillo de una profunda trama criminal en la que se vinculaban altísimos funcionarios judiciales y un sector de la política santafesina.

La investigación expuso al senador provincial Armando Traferri como uno de los organizadores de la red de juego ilegal que venían recibiendo la presión de Los Monos para participar del negocio. Esas relaciones son investigadas por los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra y tiene como principal implicado político a Traferri, que el 23 de agosto deberá declarar por estar comprometido en importantes causas por lavado de dinero y juego clandestino. 

Peritos en la escena de ataque a balazos del centro penal.

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Un momento de altísimo impacto político que podría impactar en el tramo final de la campaña del ex ministro Agustín Rossi, que tiene en Traferri a una liado clave y lleva a su protegida, la vicegobernadora Alejandra Rodenas, como compañera de fórmula al senado.

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Como sea, este jueves los fiscales sumaron otra imputación contra 'Guille' Cantero que incluye a Carlos Damián "Toro" Escobar, un segunda línea de la banda, bajo la figura de asociación ilícita mafiosa, según la cual Cantero le habría prestado "mano de obra barata" (sicarios) al líder del sindicato de Taxistas, Horacio Boix, quien lo habría contratado para ejecutar a su adversario político.