En lo que tal vez sea el momento de mayor relajamiento en los cuidados para evitar contagios de Covid 19, las sesiones remotas vuelven a ser parte de un debate en el Congreso.

Es que este martes Cristina Kirchner sorprendió con un decreto para prorrogar esa modalidad por otros dos meses y Cambiemos le envió una carta reclamando la presencialidad plena, tanto en recinto como en comisiones.

En la Cámara de Diputados las sesiones remotas no están habilitadas, el oficialismo no tiene mayoría propia y la oposición no acepta su continuidad, aun cuando la virtualidad desde diciembre estaba limitada a quienes registren problemas de salud. Sin ese dato, el recinto no volvió a abrir el 8 de julio.

Los jefes de Cambiemos en el Senado quieren una resistencia similar. "Se ha retornado a la presencialidad escolar en todo el país, se habilitan espectáculos deportivos con público, están funcionado los vuelos a las distintas provincias y los demás poderes del Estado han regresado a la presencialidad. No vemos motivo para prorrogar el funcionamiento remoto", reclamaron en la carta que le enviaron a Cristina. 

La firmaron los presidentes de los bloques UCR y PRO, Luis Naidenoff y Humberto Schiavoni; y Juan Juan Carlos Romero, jefe del interblqoue federal que oficia de aliado de Cambiemos. 

El decreto para prorrogar las sesiones remotas (firmada por la secretaria administrativa María Luz Alonso) aún debe pasar por el recinto, pero durante 2020 el Frente de Todos usó su mayoría automática para aprobarlo. 

Cristina Kirchner. 

LPOJuan Casas

Cambiemos reclamó que se apruebe con dos tercios del recinto, imposible de alcanzar sin sus votos, por considerar que se trata de una alteración del reglamento. Pero el oficialismo no lo entendió así. Este miércoles, durante la reunión de la comisión de relaciones exteriores, convocada por zoom, el radical Julio Cobos anticipó que no aceptarán esta modalidad.

La justificación para seguir con este sistema es que si bien las cuarentenas se relajaron por actividad, la emergencia sanitaria continúa vigente y por lo tanto no hay razón para volver a reunir los 72 senadores en el estrecho recinto del palacio. 

Tampoco hay demasiado espacio en las salas reservadas para los debates en comisión, que desde el inicio de la pandemia se realizaron en forma remota, sin excepciones. En el recinto, el protocolo vigente habilita a reunir hasta 20 senadores en forma simultánea, pero permite que no haya ninguno si así lo quisieran. 

De hecho, la última sesión casi no tuvo bancas ocupadas por la campaña electoral. La próxima sería después de las elecciones y Cambiemos quiere que sea presencial. Pero hay un decreto de Cristina para que sea por zoom.