Eduardo "Wado" de Pedro y Santiago Cafiero negocian el nuevo gabinete como enviados de Cristina Kirchner y Alberto Fernández para salir de la crisis política que sacude al Gobierno desde la derrota en las primarias.

El ministro del Interior y el jefe de gabinete tienen las horas contadas en el Gobierno y son ambos la carta de negociación de la vice y el presidente. "Si se va uno, se va el otro", dicen en el Ejecutivo. En un hecho inédito hasta para Argentina, ambos delinean un gabinete que van a abandonar.

"Puede haber fumata blanca", dijeron a LPO en el sector de la vicepresidenta, que recibió a Wado por la tarde en el Senado. El primer gesto en ese sentido fue la renuncia del vocero presidencial, Juan Pablo Biondi, que había sido fuertemente criticado por Cristina.

Alberto busca un gobernador para la jefatura de Gabinete, pero está difícil

En simultáneo, Alberto intenta convencer a algún gobernador para que asuma de jefe de gabinete pero todavía no pudo. Los gobernadores quieren asegurarse el aval de Cristina para no dejar sus provincias a cambio de un cargo envenenado.

El chaqueño Jorge Capitanich fue el primero en salir a hacer público su rechazo a la oferta de sumarse al Gobierno. En primer lugar sus allegados difundieron a la prensa un breve comunicado en el que aseguraron que "se descarta que el primer mandatario forme parte del gabinete nacional".

Luego "Coqui" escribió una carta en la que habló con dureza de la derrota del domingo y en el que sin decirlo directamente, sugirió que se quedará en su provincia. "En el 2019, el pueblo del Chaco nos otorgó un voto de confianza, y la posibilidad de trabajar incansablemente, día a día, todos los días, para transformar sus vidas para siempre", escribió.