Oscar Lescano afirmó que el corte de luz que afectó a la mayoría de los barrios de Capital Federal fue por la explosión de dos usinas generadoras, situadas en el barrio platense de Abasto, y descartó por completo la teoría de un complot.

“Hubo una sobrecarga de demanda y explotó todo. Acá no hay nada raro”, señaló ante LPO. Lescano es testigo de la pelea que mantienen las distribuidoras de energía con el Gobierno nacional, que se niega a habilitar un aumento de tarifas y amenaza con reducir los subsidios a las empresas que así lo hagan.

La disputa llegó al punto de que, por primera vez en una década, varias eléctricas dejaron de pagarle a Cammesa, la empresa que controla el Gobierno y se encarga de brindarle la energía a las distribuidoras minoristas. En este contexto, nadie habla de inversión.

Entre las incumplidoras están Edenor y Edesur, las compañías que brindan servicio en Capital Federal.

En los foros kirchneristas comenzaron a especular con la idea de que las empresas habían empujado el corte como un mensaje antes del cacerolazo de mañana.

Lescano lo descartó de plano. “Es imposible. Si alguien hace algo intencional a mí los compañeros me lo dicen”, aseguró.