Unos 600 funcionarios judiciales encabezados por la jefa de los fiscales nacionales y federales Alejandra Gils Carbó encabezaron un encuentro para discutir una "Justicia Legítima". Allí cuestionaron a los jueces de la Corte Suprema por "sumisión" a los intereses mediáticos y económicos.

La procuradora general de la Nación encabezó en la Biblioteca Nacional la apertua de la "Justicia legítima" de la que participaron entre 500 y 600 miembros del Poder Judicial y que se extenderá hasta mañana.

Este "es el primer paso de un largo camino que no se agota en la indignación y en el rechazo a una manera falaz e intencionada de \'invocar independencia\' para encubrir sumisión a grupos, intereses y poderes partidarios, económicos, mediáticos a cambio de ventajas y beneficios", dice el documento elaborado durante la primera jornada.

"Defendemos una noción de independencia que no ignore la trama de poderes formales e informales que atraviesa el espacio en el que trabajamos y el mundo en el que vivimos y somos concientes de los deberes que nos son propios y estamos dispuestos a cumplirlos sin claudicaciones", agrega el texto.

Gils Carbó pidió además terminar con los "lobbies oscuros que mueven los hilos de la magistratura" y reclamó una "Justicia legítima", nombre con el que se designaron al encuentro en el que participó un grupo de jueces, fiscales y defensores cercanos al pensamiento del gobierno nacional con el fin de que "no haya feudos, padrinazgos, ni familia judicial".

La procuradora también le habló sin nombrarlo al presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, quien el martes inauguró el año judicial: "se requieren más debates que consensos, más discusión que unidad corporativa", dijo.

Lorenzetti había señalado que una de las funciones de la Corte es "identificar los consensos de la sociedad".

El texto difundido por los jueces kirchneristas apela a una discusión sobre la formación de los jueces, magistrados, funcionarios y agentes; cómo y por quienes se llevan adelante los procesos de selección para ingresar y permanecer en la institución judicial en todos sus niveles; cómo se asegura que la postulación y elección de miembros de los consejos de la magistratura sea abierta y sin restricciones; cómo se conforma y se exhibe la gestión de los recursos, de la jurisdicción y de la administración; cuáles son las condiciones imprescindibles para efectivizar el acceso a la justicia para todos, protegiendo a los vulnerables y cuáles las posibles vías de intervención de la sociedad civil en la construcción de una Justicia fuerte, independiente y democrática. Y estamos dispuestos a persistir en este intento.

Como invitada especial estuvo la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien pidió que los jueces paguen el impuesto a las ganancias "como el resto de la sociedad", lo que fue apoyado con un aplauso del auditorio.

Gils Carbó calificó hoy a esa postura de la Corte y las asociaciones de "reacción coorporativa" con una "visión sesgada" donde "la independencia judicial aparecía como un mero slogan" y consideró que "la independencia judicial se construye desde adentro".
La jefa de los fiscales describió que a lo largo de la historia se construyó un "modelo judicial elitista" con una "matriz del poder judicial burocrática y autoritaria" que "está latente y reacciona" que avaló los gobiernos militares.

"Hubo ficción de justicia independiente durante muchos años que pudo ser por un poder judicial elitista que concibió una magistratura que no bregaba por valores democráticos", sostuvo.

En ese marco, dijo que en los años 90, "durante el neoliberalismo", no hubo críticas al Poder Judicial que "no defendía" el derecho de las personas frente a las corporaciones "¿Dónde estaban las asociaciones de magistrados? ¿Dónde estaban las cautelares que son furor hoy?", se preguntó.

Sin presencia de miembros de la Corte Suprema ni de jueces del fuero federal porteño, entre otros estuvieron los integrantes de la Cámara de Casación, Alejandro Slokar y Angela Ledesma, los fiscales Felix Crous, Jorge Auat, Javier De Luca y Mónica Cuñarro, los jueces Martín Vázquez Acuña, María Laura Garrigós de Rébori, Roberto Gallardo y Carlos Rozanski, entre otros.